Karina Jelinek fue una de las bellezas que representaron a la Argentina en la Copa del Mundo en Alemania. La morocha más sexy aprovechó y viajó a Praga, la tierra de su familia paterna.
«En Praga estuvimos un día y medio, pero fue emocionante. Cuando le comenté a papá que con mi novio íbamos para allá no lo podía creer. Llevamos dos cámaras para registrar todo, me compré algunas cosas y descubrí una ciudad hermosa», contó la diosa.
Además, expresó: «Lo que más me impresionó fue la construcción gótica con tantas cúpulas. Conocer Praga fue uno de los recuerdos más lindos de este viaje que quedará grabado en mi memoria».
Como era de esperarse, Karina no pasó desapercibida entre los europeos. «Son todos tan rubios que una morocha les llama la atención», reveló.
Jelinek no volvió con las manos vacías: «Al Mundial traje dos valijas, pero me voy con tres o cuatro. Cuando eres mujer y tienes 34 años como yo, una de las cosas que más disfrutas en un viaje es gastar» contó a una conocida revista.
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